Los Carroñeros: desde la Operación Cóndor, hasta los Fondos Buitres

Mario Jordán
Fuente, https://heraldocubano.wordpress.com/

En 1939 el revolucionario-poeta Cesar Vallejo en su poemario “España, aparta de mi este cáliz”, en el poema XIV o XV, según la edición, señalaba:

…! Cuídate del que come tus cadáveres,

del que devora muertos a tus vivos!

Tal parece una advertencia de lo que vendría después y, por cierto, que bueno sería “si olvidáramos la historia”. ¿No es lo que pretende el presidente Obama?

El imperialismo norteamericano se fundamentó desde los primeros años del siglo XIX y en 1823 con la doctrina Monroe miraba hacia el Sur y al Caribe, dejándole claro a las naciones europeas que para Estados Unidos Latinoamérica estaba dentro de su esfera de influencias.

aguila

De inmediato Washington activó sus redes, apoyándose en la trilogía que mutaría más tarde por determinadas circunstancias, pero hasta hoy y en esos ciclos están presentes: las oligarquías nacionales, el clero y sus ejércitos.

Fueron impuestos regímenes conservadores que dominaron el escenario de América Latina post independentista en la primera mitad del siglo XIX; así las luchas inter oligárquicas entre conservadores y liberales establecieron la inestabilidad política en la que se fraguaron los nuevos actores de nuestra historia.

No es de esa historia de la que queremos ahora hablamos, sino de la del nuevo estilo de los mismos carroñeros.

Las fuerzas conservadoras de la región financiadas desde Washington, vuelven a demostrar en Brasil su multiplicidad de tácticas para reapropiarse del poder, como ya lo hicieron en Argentina, incluida la burla al orden democrático que ellos mismos diseñaron.

Una vez más quedó al desnudo el fracaso de la fórmula de conciliación de clases.

Es importante insistir en la mutación de sus tácticas políticas, pues cada vez que ellas provocaban una reacción de actores progresistas o revolucionarios se acompañan de algunas variantes, como sucedió después de la primera y segunda guerras mundiales.

Así de forma cíclica se cumplieron esas actuaciones, hasta llegar a la teoría del asesinato en masas que habían practicado en Dresde, Hiroshima y Nagasaki, y más tarde se ensañaron contra Viet Nam, Laos y Cambodia. Recientemente lo demostraron en Afganistán, Irak, Pakistán y Siria.

En nuestra América desde los llamados “Años del Lobo” (también carroñeros) masacraron en Guatemala, El Salvador, Cuba y Nicaragua, eran los años de la Escuela de las Américas y la crianza del “Cóndor”, el cual cayó despiadadamente sobre los países del Cono Sur para aplastar los movimientos de izquierda.

Cuando los nuevos actores cambiaron el ciclo conservador-liberal, e inclusive llegaron a una nueva etapa de la integración latinoamericana, el imperialismo yanqui retomó su eterna fórmula oligarcas-clero-ejércitos, para retrotraer la historia.

Ejemplo de esto son los casos de Venezuela en 2002, Bolivia en 2008, Honduras en 2009, Ecuador en 2010, Paraguay en 2012 y Argentina en 2015; donde combinaron las acciones desde un “Cóndor” evidente, al enmascarado “golpe suave” diseñado por Gene Sharp, añadiéndole un nuevo componente, la guerra mediática a través de los medios de comunicación incluidas las redes sociales de Internet.

¿Se podrá seguir creyendo en la viabilidad de proyectos de corte reformista?

Tal vez haya que animarse a asumir que, si no se impulsan transformaciones de fondo, si se apela a políticas económicas ortodoxas y no se apuesta al protagonismo popular, el progresismo podrá generar importantes mejoras sociales, pero tarde o temprano la Casa Blanca y la CIA, crearán las condiciones necesarias para el regreso de las derechas, como afirmara la argentina Stella Calloni.

No olvidemos el uso de las Cumbres de las Américas. A partir de la celebrada en Trinidad y Tobago, Barack Obama comenzó su política de “olvidar el pasado”.

En esa Cumbre declaró: “el objetivo de Estadios Unidos es recuperar su liderazgo e influencia en América Latina”.

Ninguno de los esquemas de control y represión se ha desactivado bajo la Teoría de la Seguridad Nacional, tan vigente y agazapada hoy en día.

Retomando a Cesar Vallejo en su poemario “Poemas Humanos” de octubre 1937, encontramos estos versos:

Confianza en el anteojo, no en el ojo

en la escalera, nunca en el peldaño…

…Confianza en muchos, pero ya no en uno

…En la madre, más no en los nueve meses,

En el destino, no en el dado de oro,

Y en ti solo, en ti solo, en ti solo.

Ante este escenario no se puede olvidar lo que afirmó el Che Guevara: ¡A los yanquis ni un tantito así!

0 comentarios: