El inolvidable legado de Allende a 44 años de su partida (+ Video)
"La historia es nuestra y la hacen los pueblos" dijo minutos antes de morir, un día como hoy, 11 de septiembre. | Foto: MemoriaViva |
El pensamiento político y humano de Salvador Allende continúa vigente en el pueblo de América Latina y el mundo, que lucha por una sociedad más justa y equitativa.
Fuente, https://www.telesurtv.net/
Salvador Allende es una de las personalidades más importantes y recordadas de la historia de Chile. Fue electo como presidente de ese país en 1970 para cumplir su mandato hasta 1976, sin embargo el 11 de septiembre de 1973, Augusto Pinochet -en complicidad con los Estados Unidos- lideró un golpe cívico-militar contra su Gobierno. Esa mañana, el presidente Allende murió en el palacio de La Moneda defendiendo "el mandato del pueblo", como dijera en sus últimas palabras.
Semblanza de un líder
Salvador Allende nació el 26 de junio de 1908, en el seno de una familia de clase media de Valparaíso. De niño viajó por el país a causa de las actividades laborales de su padre, un abogado que ocupó varios cargos políticos en Chile.
En 1924 ingresó a estudiar Medicina a la Universidad de Chile. Llevado por su profunda vocación social, en 1929 integró el grupo político universitario "Avance", siendo un importante referente estudiantil. A los 25 años se convirtió en el primer secretario regional del Partido Socialista de Chile.
Al obtener su título de médico cirujano, Salvador se dedicó a la medicina social, dejando como legado diversos trabajos sobre salud pública. Antes de cumplir los 30 años, fue electo Diputado por Valparaíso y Quillota.
Bajo el Gobierno del presidente chileno Pedro Aguirre Cerda, ejerció como ministro de Salud. En 1945, fue electo Senador, llegando a presidir la Cámara alta del Congreso.
En 1951, junto a comunistas, radicales doctrinarios y la izquierda socialista, participó en la fundación del Frente Nacional del Pueblo (FRENAP), alianza calificada como una "conciencia en marcha". Un año después se postuló por primera vez para presidir el país.
Luego de tres intentos, el 4 de septiembre de 1970, Salvador Allende fue elegido presidente de Chile, apoyado por la histórica coalición de partidos de izquierda llamada "Unidad Popular".
La historia la hacen los pueblos
Ese hecho marcó al país y a la sociedad chilena, transformándose hasta el día de hoy, para muchos de los seguidores de su legado, en el día más alegre de la historia de la nación. Sin embargo, su triunfo signiricaría también el inicio de una persecusión política que no sólo acabó con el mandato del pueblo, sino también dañó profundamente a varias generaciones, hasta el día de hoy.
Su convicción de que el socialismo podía construirse sobre la base de las tradiciones democráticas, en lo que se definiría como la vía chilena al socialismo, promovió importantes reformas políticas, económicas y sociales que transformaron al país, como la nacionalización de la gran minería del cobre y la profundización de la reforma agraria.
Por primera vez, el pueblo tenía en sus manos su propio destino. La igualdad de oportunidades y derechos eran una realidad palpable y la vida digna y justa estaba siendo garantizada por Allende.
Durante la Unidad Popular la cultura chilena floreció profundamente en referentes políticos y artísticos como el cantautor Víctor Jara (asesinado por la dictadura el 16 de septiembre de 1973) o el poeta Nobel de Literatura 1971, Pablo Neruda, quien falleció el 23 de septiembre, asediado por una enfermedad que se aceleró por la tristeza del golpe de Estado, doce días antes de su muerte.
Su discurso y sus medidas revolucionarias eran abiertamente opuestas al orden establecido por Estados Unidos en la región y afectaban a los intereses de la oligarquía y de los sectores de la derecha del país, quienes iniciaron una campaña de desestabilización económica contra el Gobierno.
0 comentarios: